Por: Fabián Guerrero @fegueri_
Después de la tempestad, viene la calma. Esta vieja frase parece ser aplicable
a la situación que vive en la actualidad nuestro amado equipo, Unión
Magdalena. Luego del tormentoso comienzo de la segunda vuelta, en el que no
se consiguió victoria alguna en las seis primeras fechas, con cambio de director
técnico incluido, hoy vemos que de los últimos nueve puntos jugados, se han
conseguido siete, regresando al grupo selecto de los “ocho de Colombia”.
Además de los resultados, se ve un equipo diferente. Carlos Silva ha hecho
pocos cambios en la nómina, pero la actitud es distinta. Por ello consideramos
que la situación con Eduardo Retat era insostenible y su salida fue una buena
decisión. La llegada de Carlos Silva al banco bananero, genera dudas en la
hinchada por la historia con el equipo. Si bien es cierto lo llevó a dos finales
semestrales, ambas las perdió, aumentando la decepción entre todos aquellos
que sufrimos desde hace diez años esperando el tan anhelado ascenso.
Esta nueva experiencia puede tener resultados diferentes y hasta el momento
lo está logrando, devolviendo la confianza a la fanaticada que se había perdido
por la mala campaña con Retat. También se abona a Carlos Silva, la
participación de nuevas caras, como las de Duván Blanco, Devis Oliveros o
Daiver Vega, lo que implica que se le da la confianza a las jóvenes promesas
del equipo y especialmente a los samarios.
Con todo alrededor, esperemos que este sea un nuevo comienzo del Unión
Magdalena para lograr el gran objetivo de ascender a la Liga Águila. Que el
equipo mejore algunas cosas puntuales en el funcionamiento táctico y que los
jugadores brasileros dejen de jugar. Qué mala inversión hizo la directiva. Hay
mucho talento en la ciudad como para que ellos le quiten un puesto a uno de
los nuestros. Pero bueno, nada es perfecto. Por ahora, hay que celebrar lo que
parece ser el renacer del equipo. Y esperar, que los dos próximos partidos de
local, frente a Bogotá y América, sean sendas victorias que nos permita
afianzarnos en los puestos de clasificación.
El Unión Magdalena debe estar siempre arriba en la tabla. Ojalá que Carlos
Silva y sus muchachos lo entiendan y logren parar tantos años de sufrimiento.
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